No me detengas ahora, ya es tarde y debo irme.
No te asustes; estaré bien. Por favor, no llores, no me detengas ahora, cada
vez es más difícil marcharme, pero ya es tarde y debo irme, esta vez no
sobreviviré a esto, puedo sentir mi propia renuncia, pero tranquilo, no tengas
miedo, estaré bien. Por favor, suelta mi alma, déjame llevármela, no me
detengas ahora, suelta mi corazón también quiero tenerlo conmigo para cuando me
vaya, de esta manera, seguirás viviendo en mí. ¡No temas! Seré un ángel, voy a
cuidarte, pero por favor, no me detengas ahora, ya es tarde y debo irme.
No hay comentarios:
Publicar un comentario